lunes, 29 de mayo de 2023

QOYACURA OCLLO: La Ultima Reina Inca

La Historia peruana está llena de mujeres indígenas líderes, estoicas, valientes y guerreras que datan de tiempos de los Incas como Mama Huaco, Chañan Curi Coca o Mama Runtu. Paradójicamente estas figuras han quedado olvidadas en nuestra Historia, pues no se mencionan en los colegios ni en los libros escolares.

Desde su infancia, tuvo que vivir la cruenta guerra civil fratricida, donde prácticamente fue aniquilada la panaca del Inka Huáscar. Uno de los sobrevivientes, Manco Inca, fue nombrado Inca por los españoles tomando como esposa a su hermana Cura Ocllo según la tradición incaica.

Al inicio vieron a los españoles como salvadores, Wiracocha que llegaron del mar para acabar con tan terrible guerra y vengar los crímenes de Atahualpa contra su panaca, por ello los ayudaron en todo lo que pedían, incluso entregándoles el sagrado oro del Coricancha.

Esto cambió cuando Gonzalo Pizarro quiso tomar a Cura Ocllo para él mismo. Manco Inca trató de convencerlo de tomar otras esposas, le ofreció incontables indígenas, las más bellas de Los Andes, pero Gonzalo Pizarro estaba empecinado con Cura Ocllo. Se dice que incluso Manco Inca llegó a buscar a la indígena más parecida a su esposa y vestirla igual a ella, entregándosela a Gonzalo Pizarro aprovechando que el efecto de la embriaguez cubra el engaño. No fue así y al darse cuenta de la treta, Gonzalo Pizarro mandó a encerrar a Manco Inca y tomar a Cura Ocllo a la fuerza.

Este fue el detonante para iniciar la sublevación de Manco Inca, el quiebre de la alianza con los españoles y la rebelión más grande hasta entonces para expulsarlos del territorio. Se podría decir que Cura Ocllo fue la Helena de Troya de este lado del planeta al detonar su secuestro tan terrible guerra. La Historia nos enseña que te puedes meter con el oro sagrado, pero no con la esposa.

En todo momento, Cura Ocllo apoyó a Manco Inca en su sublevación, por eso fue un duro golpe al Inca cuando ella cayó prisionera de los Pizarro. Gonzalo Pizarro, aún resentido por su rechazo, ordenó a todos sus hombres violarla, pero ella se resistió usando la fuerza como colocándose sustancias apestosas que provoque nauseas en los hombres que querían acercársele.

Conociendo su importancia para el Inca, la usaron para forzar su rendición. Si no se rendía, sería torturada y asesinada. Manco Inca se mantuvo firme en su rebelión por lo que Cura Ocllo fue entregada a los cañarís, que aún tenían la sangre en el ojo por los abusos que Atahualpa cometió contra ellos, para que se desquiten con Cura Ocllo.

Ellos la desnudaron, la amarraron a un palo y la golpearon. Los españoles miraban atónitos como la coya del Inca no emitía siquiera un quejido ante la brutal golpiza. Por lo que los cañarís cargaron sus arcos y la usaron como blanco para disparar sus flechas.

Los aguerridos españoles, a pesar de estar acostumbrados a la guerra y la muerte, observaban consternados como Cura Ocllo resistía en silencio cada uno de los flechazos. Pedro Pizarro llegó a escribir en su crónica: "¡Uno no puede sino admirar a una mujer que no se queja ni habla ni emite un solo gemido de dolor de las heridas mientras muere!".

Finalmente, sus últimas palabras fueron retadoras ante sus agresores cañarís gritándoles de forma desafiante: "¿Sacan su ira con una mujer?... Dense prisa y acaben conmigo y así podrán satisfacer todos sus deseos".

No contentos con la tortura, una vez muerta colocaron su cuerpo en una canasta y lo enviaron flotando en el río Vilcanota para ser encontrado por los hombres de Manco Inca. Pocos días más tarde, Manco Inca recibió el cadáver destrozado y quedó "abatido y desconsolado por la muerte de su esposa. Lloró y agonizó por ella, pues la amaba mucho y regresó [con su cuerpo] retirándose a Vilcabamba".

Hoy en día, podemos encontrar una estatua en Ollantaytambo, en el lugar de su muerte, como único recuerdo de una de las mujeres más fuertes y valientes del Incanato, la última reina Inca a la que lamentablemente la Historia peruana ha decidido olvidar. Sin embargo, nosotros no queremos olvidar esos casos de mujeres en nuestra Historia que, lejos del victimismo que se exalta en la época actual, fueron grandes reinas, líderes y gobernantes.

Como hoy en estos tiempos hay grandes mujeres indígenas que defiende al Perú de muchas injusticias que se dan. 
La mujer debe ser siempre guerrera aguerrida a sus principios y sus valores y gran luchadora social por sus pueblos indígenas y sus raíces.

domingo, 21 de mayo de 2023

Serpiente: El Mito de Amaru

La serpientes representaban

lo infinito para los incas. La serpiente simboliza el mundo de abajo o el mundo de los muertos (el Ukhu Pacha). Cuando las personas abandonaban el mundo terrenal se unían a esta otra dimensión representado por la serpiente. Para los incas la serpiente además representaba la sabiduría

La cosmología andina ha estado presente en el mundo quechua, y desde muy temprano su simbolismo ha estado presente en Amaru (serpiente en quechua) y es de gran importancia presente en agua, rayo, fuerza en su totalidad, es un animal que atraviesa mundos.

El rayo se le asocia con el Amaru (serpiente), el cual sería el primero que habría habitado la tierra según Waman Poma cuando dice “que en esta tierra primero vivían serpientes amaro...” y otros animales (Waman, 1614).

Mito de Amaru:

Largo mucho tiempo, el pueblo "Wanca" había olvidado el respeto a sus huacas (objetos o lugares sagrados), por ende, fueron castigados, las nubes que daban lluvia se alejaron y la fecundidad se tornó en desierto.

La tierra seca y partida era azotada por un sol abrasador, mientras que los gigantescos monstruos que habitaban el lago de los Wanca, impedían que hombres y mujeres llegasen a él. Para proteger a los Wankas, Tulunmaya, el arco iris, engendró al primer Amaru.

Esta fiera fabulosa eliminó a los monstruos, pero pronto se convirtió en una nueva carga para los pobladores, pues debían proporcionarle grandes cantidades de alimento para saciar su ímpetu.

Es bien sabido que cuando están enfadados, los Amarus resoplan un viento helado y escupen granizo sobre las chacras, dañándoles irreparablemente. Un día, el padre Wiracocha se compadeció de su pueblo y creó a Illapa (el rayo) y Wayra (el viento), quienes desde entonces dominan a las fieras bestias y les obligan a replegarse en el fondo del lago.

Cuando ve acercarse una nube cargada de tormenta, el Amaru intenta llegar a ella para así esparcir su granizo sobre los sembradíos. Solamente en esos momentos es vulnerable; es cuando se le puede ver, bajo la forma de una inmensa serpiente sinuosa que busca alcanzar lo alto del cielo. Apenas logra distinguirlo, el campesino agitará su sombrero para dar aviso a sus héroes salvadores.

Entonces, llegan presurosos el rayo y el viento serranos y, tras descomunal batalla, logran vencerlo y partirlo en dos, para confinarlo otra vez a las profundidades del lago.

Una forma que tienen los naturales de leer el destino es fijarse en el color del Amaru:

Amaru Negro: Si trata de alzarse a los cielos, será un año pernicioso y dificultoso para las personas.

Amaru Blanco, será un año hermoso y bueno.

Cuando llegaron los españoles, comenzaron a decir que no era el rayo, sino el Apóstol Santiago, quien doblegaba al Amaru con ayuda de su carabina que disparaba balas de oro, y que los truenos eran el ruido del galope de su brioso caballo blanco.

Con el tiempo, los Amarus se fueron transformando y reduciendo de tamaño. En algunas lagunas toman la forma de un toro, conocido como puka amaru o amaru rojo.

Por las noches, este bravo animal sale del centro de la laguna y se acerca a las piedras a su alrededor, convirtiéndolas momentáneamente en pequeños animales. Estas piedras tocadas por el Amaru tienen gran valor para los campesinos y ganaderos por su capacidad para propiciar el crecimiento de las cosechas y el ganado.

Otra especie de Amaru ha sido encontrada en Huancavelica. Se trata de grandes serpientes de dos cabezas, las cuales habitan bajo la tierra y, ocasionalmente, causan accidentes a los trabajadores de las minas.

Imagen: Machupicchu pueblo – Internet

lunes, 8 de mayo de 2023

Bartolina Sisa: La Virreina Aymara

Gladys VlankoCh. quien personifico a Bartolina Sisa
en la película Fuego de Libertad
Durante 109 días las tropas de Tupac Katari cercaron la ciudad de La Paz, hasta la llegada de las fuerzas realistas.
En plena sublevación, Sisa cayó prisionera. Se cree que fue traicionada. Cuando la interrogaron sobre las motivaciones de la rebelión, contestó: "Para que extinguida la cara blanca sólo reinasen los indios". Historia de la rebelión de Túpac Catari, 1781-1782.

La obra en su artículo, indica que pese al "brutal interrogatorio", Sisa no dio información, "no culpó ni delató a mestizos, vecinos ni a curas que eran sospechosos de apoyar la rebelión". Su esposo intentó varias veces rescatarla e incluso se cree que llegó a ofrecerse a cambio de su liberación.

Aunque el cerco duró más de cien días, la llegada de refuerzos para las tropas españolas hizo que Katari se tuviera que replegar. Y una madrugada cayó preso. "El 14 de noviembre, Bartolina Sisa fue obligada a presenciar el descuartizamiento público de Túpac Katari en la plaza de Peñas", señala el artículo".

La tradición aymara indica que antes de morir, Katari dijo la frase que ha trascendido el tiempo y las fronteras: "Hoy muero, pero volveré y seré millones".

La historia boliviana señala que los gobernadores de la corona española decidieron hacer una amnistía, "perdonar a todos los sublevados para evitar un nuevo levantamiento, pero fueron muy drásticos en el castigo a los caudillos".

El homenaje histórico

tomó tiempo para que el rol protagónico de Sisa en la lucha independentista se resaltara en el relato histórico.

"En una época, los héroes de la sublevación no eran considerados de la misma manera que Simón Bolívar, pero desde los años ochenta ha surgido una nueva mirada de la historia, especialmente cuando se conmemoró el bicentenario de la sublevación", reflexiona Cajías.

Aunque en el mundo aymara ambos líderes ya estaban consagrados, un grupo de historiadores, varias mujeres entre ellos, ayudaron a rescatar la figura de Sisa.

"En 1981, comenzaron a hacerse muchos estudios y (Sisa y Katari) han subido a la categoría de héroes. Han sido consagrados políticamente por el Estado boliviano, lo
cual ocurrió especialmente durante la presidencia de Evo Morales".

Nació el 25 de agosto de 1750 en la provincia Loayza del departamento de La Paz. Hija de comerciantes, se dedicó a esta actividad desde su juventud. Contrajo matrimonio con Julián Apaza (Tupac Katari). Junto a su esposo lideró el levantamiento indígena contra las autoridades virreinales y las reformas fiscales.

Durante 109 días las tropas de Tupac Katari cercaron la ciudad de La Paz, hasta la llegada de las fuerzas realistas.

Debido a una traición Bartolina Sisa fue capturada. En cautiverio fue torturada para delatar a sus compañeros. Su esposo trató de rescatarla, organizando un segundo cerco a la ciudad de la Paz que no tuvo éxito. Tupac Katari fue capturado en Chinchay, había sido traicionado por uno de sus hombres. El 13 de noviembre de 1781 fue descuartizado frente a su esposa.

Bartolina recibió su sentencia el 5 de septiembre de 1782. Antes de ser ejecutada, fue sacada desnuda a la Plaza Mayor, atada del cuello a la cola de un caballo. Se le cortaron los senos, luego la arrastraron y la ahorcaron. Sus restos fueron expuestos en varios pueblos como forma de escarmiento.

Así murió la que fue llamada en su época “la virreina” y dirigió junto a su esposo un levantamiento que sucedió a la gran rebelión de Túpac Amaru II y los hermanos Katari.

Juan José Pacheco Ibarra (del rincón de la historia Peruana).

Richard Ilimuri